Este pasado fin de semana se ha celebrado en Morillo de Tou (Huesca) la segunda edición de Mayencos, encuentro de barranquismo organizado por las federaciones aragonesas de montaña y espeleología, FAM y FAE. De nuevo, una gran oportunidad de reencontrarte con toda esa gente a la que sólo ves de año en año, de encuentro en encuentro. Y también de compartir experiencias, proyectos... y algunas cervezas, ¡por supuesto!
La novedad consistía esta vez en que, más allá de los pases audiovisuales y las charlas que ya son habituales en todos los encuentros, era posible participar en diversos talleres formativos. Así, se organizaron los denominados workshops de aguas vivas, progresión básica y avanzada, equipamiento, autosocorro y ecosistemas fluviales.
El grupo de amigos habituales fuimos subiendo a lo largo del viernes, Anaïs y yo los primeros. A última hora de la tarde, y después del picoteo de bienvenida, disfrutamos de la proyección "III Meeting Madeira", de Rafael Carnicer y Carlos Sánchez. Bueno para soñar con uno de los proyectos a los que intento poner fecha...
El sábado, los amigos nos repartimos por los diferentes workshops y masterclass. Por la mañana, asistí a la clase magistral de Diego Dulanto "Primeros Auxilios en Entornos Hostiles". Muy interesante, práctica y amena. A un servidor le vieron cara de maniquí, por cierto, y tuvo que salir a la tarima para dejarse manipular en más de una ocasión.
Ya por la tarde, junto a Frank, Oscar e Ivana me desplacé hasta Escalona para participar en el taller de Autosocorro. Cuatro horas intensas para practicar maniobras de auxilio, algunas básicas y otras complejas, que todos deberíamos conocer, pero que esperamos no tener que aplicar nunca. Muy útil.
Tras esto y un par de refrescos (cerveza no, que hay que conducir), volvimos a Morillo de Tou para ver el vídeo "Los sueños locos. Reunión, 26 barrancos en 27 días", de Ignacio Fernández y José Manuel Aragón. El título lo dice todo... impresionante.
Luego vino la esperada cena de hermandad y el sorteo de regalos. Por primera vez en mi vida barranquista, ¡me tocó algo! Aunque no tiene mérito, porque nos tocó a todos los del grupo, creo. La mejor parada, Bego con su mochila Rodcle...
El domingo continuaban las charlas y talleres. Tenía previsto asistir a la charla de Morta sobre los usos del GPS, pero lamentablemente, un problema familiar me obligó a volver a casa el mismo sábado de madrugada... Sin embargo, el sabor de boca que me dejó la organización y el ambiente de Morillo fue, como el año pasado, extraordinario. Volveremos a vernos allí el año que viene. Seguro.
La novedad consistía esta vez en que, más allá de los pases audiovisuales y las charlas que ya son habituales en todos los encuentros, era posible participar en diversos talleres formativos. Así, se organizaron los denominados workshops de aguas vivas, progresión básica y avanzada, equipamiento, autosocorro y ecosistemas fluviales.
El grupo de amigos habituales fuimos subiendo a lo largo del viernes, Anaïs y yo los primeros. A última hora de la tarde, y después del picoteo de bienvenida, disfrutamos de la proyección "III Meeting Madeira", de Rafael Carnicer y Carlos Sánchez. Bueno para soñar con uno de los proyectos a los que intento poner fecha...
El sábado, los amigos nos repartimos por los diferentes workshops y masterclass. Por la mañana, asistí a la clase magistral de Diego Dulanto "Primeros Auxilios en Entornos Hostiles". Muy interesante, práctica y amena. A un servidor le vieron cara de maniquí, por cierto, y tuvo que salir a la tarima para dejarse manipular en más de una ocasión.
Ya por la tarde, junto a Frank, Oscar e Ivana me desplacé hasta Escalona para participar en el taller de Autosocorro. Cuatro horas intensas para practicar maniobras de auxilio, algunas básicas y otras complejas, que todos deberíamos conocer, pero que esperamos no tener que aplicar nunca. Muy útil.
Tras esto y un par de refrescos (cerveza no, que hay que conducir), volvimos a Morillo de Tou para ver el vídeo "Los sueños locos. Reunión, 26 barrancos en 27 días", de Ignacio Fernández y José Manuel Aragón. El título lo dice todo... impresionante.
Luego vino la esperada cena de hermandad y el sorteo de regalos. Por primera vez en mi vida barranquista, ¡me tocó algo! Aunque no tiene mérito, porque nos tocó a todos los del grupo, creo. La mejor parada, Bego con su mochila Rodcle...
El domingo continuaban las charlas y talleres. Tenía previsto asistir a la charla de Morta sobre los usos del GPS, pero lamentablemente, un problema familiar me obligó a volver a casa el mismo sábado de madrugada... Sin embargo, el sabor de boca que me dejó la organización y el ambiente de Morillo fue, como el año pasado, extraordinario. Volveremos a vernos allí el año que viene. Seguro.
2 comentarios:
¿"J" fue vuestro monitor de autosocorro? yo lo tuve por la mañana... vaya crack!! jaja. Y por la tarde lo contrario, primeros auxilios... Esperemos no tenerlo que utilizar :S
Veo que nos turnamos para hacer las dos actividades sin coincidir, jeje. "J" fue el monitor de mis amigos, a mí me separaron de ellos (snif) y me metieron en otro grupo, con Roberto de monitor.
Estoy contigo, mejor no tener que utilizar muchas de las cosas que aprendimos!
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